Conoce todo sobre este nuevo tratamiento:
Nuestro Tratamiento Modelante Facial con Radiofrecuencia ayudará a estimular la producción de colágeno, a mejorar la circulación sanguínea y a tensar y rejuvenecer la piel. En esta sección podrás encontrar información detallada sobre el tratamiento y sus beneficios rejuvenecer tu piel.
¿Qué es la radiofrecuencia?
La radiofrecuencia facial es un tratamiento estético no invasivo que utiliza energía de radiofrecuencia para calentar las capas internas de la piel.
Estimula la producción de colágeno, mejora la circulación sanguínea y puede ayudar a tensar y rejuvenecer la piel, reduciendo la apariencia de arrugas y flacidez facial.
¿Cómo funciona la radiofrecuencia?
Cuando las capas internas de la piel se calientan mediante la radiofrecuencia, esto provoca un proceso natural de reparación.
El calentamiento estimula los fibroblastos, que son responsables de producir colágeno y elastina en la piel.
El colágeno es una proteína esencial que brinda estructura y firmeza a la piel, mientras que la elastina proporciona elasticidad.
El aumento en la producción de estas proteínas puede ayudar a mejorar la apariencia de la piel, reduciendo la flacidez y las arrugas con el tiempo.
Estimulación del metabolismo celular:
En abdomen: ElectroFit ayuda a fortalecer el core y reduce la grasa abdominal, mejorando la postura y apariencia.
En glúteos: Potencia la tonificación y elevación, generando una apariencia más contorneada y firme.
En cadera: Contribuye a reducir la grasa localizada, mejorando la silueta y aumentando la confianza del cliente.
Estimulación de colágeno:
El colágeno se encarga de unir los tejidos conectivos (músculos, tendones, ligamentos, piel, huesos, cartílagos, tejido hematológico y adiposo y órganos).
Es el responsable del grado de firmeza y elasticidad de estas estructuras y tiene un papel esencial en su hidratación.
Puede mejorar la elasticidad y la firmeza de la piel en las áreas tratadas, lo que es especialmente beneficioso después de la reducción de grasa.
Alteraciones cutáneas según la edad:
Juventud: La piel es firme, suave y elástica. Las células se renuevan rápidamente y la producción de colágeno es alta.
Mediana edad: La producción de colágeno disminuye, causando pérdida de firmeza. Aparecen arrugas finas y la piel puede volverse opaca.
Madurez: Las arrugas se profundizan, la piel seca es más común y puede haber manchas oscuras debido al daño solar acumulado.
Vejez: La piel pierde densidad, se vuelve más delgada y menos elástica. Las arrugas son más notables y la piel puede volverse frágil.